- Calles, colonias, comunidades y la propia vertiente del río son basureros clandestinos ante el nulo servicio de recolección
José Cancino / Corresponsal Diario de Chiapas
Suchiate, Chiapas.- Suchiate y sus comunidades están entre inmundicia y basura de todo tipo, a causa del deficiente servicio de recolección que el Ayuntamiento no mejora y, en muchas ocasiones, no proporciona a la ciudadanía.
El mayor foco de contaminación se registra en la cabecera municipal y las márgenes del Río Suchiate, donde cúmulos de basura que se generan a diario en tianguis aledaños al afluente y el propio mercado municipal, no son trasladados a un tiradero oficial y bajo las normas de sanidad necesarias.
La acumulación de desperdicios genera que durante el, día fétidos olores se esparzan en varias de las calles principales de la cabecera municipal. También en el parque central el problema de recolección de desechos es una constante, pese a que se encuentra a unos pasos de la presidencia municipal.
Otro de los puntos donde la basura se ha convertido en un riesgo sanitario y foco insalubre, es a orilla del río que funciona como frontera natural entre México y Guatemala, donde lugareños, comerciantes y hasta migrantes han generado asentamientos de desechos que se han acumulado y cuando se presentan lluvias son arrastramos corriente adentro, lo que propicia un daño directo a especie de agua dulce.
Entre los desperdicios se observan neumáticos, que además son nidos propicios para la reproducción del mosquito transmisor del dengue. También hay animales muertos, comida descompuesta, plásticos que tardan años en deteriorarse y vidrios que podrían desencadenar un incendio.
Pobladores de este municipio señalaron que al término de la administración de Sonia Hernández Aguilar, los servicios básicos, como es el caso de la recolección de basura, han comenzado a ser deficientes y van quedando en el olvido.
El problema se traslada a comunidades aledañas al mar, donde también hay nula captación de basura y a sus habitantes no les queda más opción que agruparla en calles o tirarla en basureros clandestinos que se han comenzado a formar.
