La relación médico-paciente se basa en la confianza, obtenida a través de la comunicación asertiva, empática, al atender con diligencia al paciente.
Dr. Agustín Medinilla Vázquez.
-En las escuelas se les enseña a pedir estudios de laboratorio, de esos rayos X bien avanzados que hay, que ahora le llaman tomografía gammagrafía.
– -¡No seas sonsa! ¡No es Rayos X! ¡Son otro tipo de estudio, se parece! El que por sonido te provoca imágenes y dicen que se llama resonancia. Me platicó que en las escuelas y hospitales no se les enseña paso a paso a conocer las estructuras que se deben ver en estos estudios, ¡solo saben los especialistas! ¡Hasta parecen patólogos! ¡Solo ellos le entienden a los tejidos normales y enfermos!
-¡Bien caros que cuestan! ¡Aun para los que ganan un sueldo fijo, porque trabajan en el gobierno. Acá estamos olvidados, aunque demos electricidad para el país. Usted se quedó sin su terreno cuando inundaron La Angostura, se tuvo que venir a invadir a las faldas del Cañón.
– -¡Ansina es! Y como tuvimos muchos hijos, vivimos apretujados y por la noche tenemos miedo que los pandilleros nos hagan algo.
Veamos lo que dicen los conocedores del estado: entrevistamos a la doctora Rosalba Martínez Tapia.
“Se debe hacer un cambio a los contenidos de medicina, dando más peso al proceso inflamatorio, a la respuesta inmune y falta el social, se olvida la historia y filosofía médica.
Comunicación de la enfermedad al paciente y familiares para explicar en términos con peras y manzanas lo que sucederá, qué se va hacer (plan) y el pronóstico.
La promoción de la salud: fundamente informar, educar para la salud. Se carece del primer nivel de atención”.
Desde finales del siglo XIX se dedica a prescribir medicamentos de laboratorio, mitigando síntomas, permitiendo que se agraven los cambios patológicos.
Para limitar el daño, lo que se le llama medicina de Segundo y Tercer Nivel.
¡Centrémonos en nuestra realidad!
