Un duelo muy esperado

Agencias
Diario de Chiapas
“¡Brasilero, brasilero, qué amargado se te ve, cada vez nos falta menos para volvernos a ver!”. Las tribunas del Ahmab bin Ali no mienten. Tras la victoria del sábado sobre Australia (2-1) en los octavos de final de la Copa Mundial, los hinchas argentinos ya empiezan a pensar en un posible enfrentamiento con Brasil en la semifinal, un superclásico esperado desde hace 32 años por ambas selecciones.
Para ello, Argentina necesita vencer a Países Bajos en cuartos de final y esperar que la Canarinha le gane a República de Corea y al rival de la siguiente ronda. Argentina y Brasil no se enfrentan en una Copa Mundial desde 1990, pero la rivalidad creció desde entonces, con numerosos enfrentamientos regionales.
Este podría ser uno de los partidos más importantes de la historia de la Copa Mundial y el mayor encuentro entre Argentina y Brasil que el fútbol haya visto jamás.
Argentina y Brasil se han enfrentado cuatro veces en la historia de las Copas Mundiales. El balance es equilibrado, con dos victorias para Brasil, una para Argentina y un empate. Los cuatro partidos tuvieron lugar en un lapso de cinco certámenes, entre 1974 y 1990.
En 1974 y 1978, los rivales se enfrentaron dentro de los grupos que definían los clasificados para la final. En el primer encuentro, Brasil venció a Argentina, pero quedó segundo del grupo que ganó Países Bajos. Cuatro años más tarde, un empate a cero sirvió para que Argentina se clasificara en un grupo en el que también estaban Perú y Polonia.
En 1982, Brasil y Argentina volvieron a enfrentarse en la misma fase. La Seleção derrotó a su rival por 3-1, en uno de los grandes partidos del mítico equipo de Zico y Sócrates. Pero la derrota ante Italia acabó eliminando a Brasil de la competición.
El último encuentro fue en 1990, ya con el formato de la Copa. En los octavos de final, Brasil jugó un partido de gran posesión y ocasiones, pero Diego Maradona desequilibró con una brillante jugada individual antes de que Claudio Caniggia marcara.
Después de tantos enfrentamientos, la rivalidad estuvo esperando un reencuentro desde entonces. Ya son 32 años en esta cuenta regresiva, que podría llegar a su fin dentro de unos días en Catar.