– Familiares de una menor que había fallecido la llevaron a clínicas particulares y al hospital creyendo que aún tenía vida, ya que movió una mano mientras la velaban
Marcos Ramos
Cintalapa.- La noche de este martes, varias personas se congregaron a las afueras del Hospital Básico Comunitario exigiendo que los doctores revisaran a una menor de edad de la que ellos aseguraban aún tenía signos vitales.
La niña de dos años de edad, había ingresado en la mañana de este mismo día y después de ser explorada por los médicos, ellos dijeron que la menor había ingresado sin signos vitales, por lo que llamaron al personal pericial para que diera fe de lo sucedido.
El padre de la Infante de nombre Patricio, dijo que como a las 11 horas llegaron al hospital pidiendo apoyo porque aparentemente su niña ya no respiraba y después de un tiempo se la entregaron y los doctores le confirmaron que Lupita ya había dejado de existir, asegurándole que ya no contaba con signos compatibles con la vida.
En ese sentido se trasladaron a su casa, consiguieron una carpa, una cajita y cuando ya la estaban velando, sus padres aseguraron que movió su manita por lo que llamaron al personal de Protección Civil para que la trasladara a una clínica particular para que la revisaran.
“En esa clínica también nos dijeron que ya no tenía vida, pero nosotros nos negábamos a aceptar eso y decidimos regresar al hospital donde ya había estado por la mañana para que la volvieron a revisar, mi esposa ingresó y se entrevistó con el pediatra y este le confirmó que la niña ya no respiraba, pero nosotros queremos que la niña sea llevada a Tuxtla para que lo revisen los especialistas porque no entendemos por qué nos dicen que ya no tiene vida y sigue moviendo su mano”, dijo el afligido padre.
“Cuando volvieron a regresar los papás acá al hospital, yo invité a que la mamá de la niña mi compañera, ella vio detalladamente todo lo que hice, la conecté el monitor, la intenté reanimar, pero todo era en vano, la niña ya no estaba con nosotros”, dijo el pediatra.
Después de que entendieron los padres y los familiares que ya no nada se podía hacer, desistieron de la idea de que la pequeña fuera llevada a Tuxtla y posteriormente, se lo llevaron a su casa para seguirla velando y hoy miércoles le brinden una cristiana sepultura.
