Jeny Pascacio / Diario de Chiapas
A propósito del Día de Muertos, la organización Melel Xojobal con sede en San Cristóbal de Las Casas, recordó el aumento de los homicidios, fallecimientos por COVID-19 y suicidios en niñas, niños y adolescentes (NNA), sin que existan programas, acciones o presupuestos orientados a reducirlos y prevenirlos.
En Chiapas, desde el año 2019 al 2021, cinco niñas, niños y adolescentes indígenas fueron víctimas de homicidios en los municipios de Aldama, Chenalhó, San Juan Chamula y San Cristóbal de Las Casas, como consecuencia de los conflictos y violencia armada por el control del territorio y enfrentamientos del crimen organizado.
El 30 de septiembre de este año, en el municipio de Chiapa de Corzo, fue asesinado a golpes por sus “supuestas” cuidadoras, un niño trabajador de 11 años de edad, originario del municipio de Tapachula.
52 ADOLESCENTES SE QUITARON LA VIDA
El suicidio de adolescentes en Chiapas, es otra causa de muerte derivada de las violencias y la ausencia de políticas incluyentes de salud mental. De acuerdo con cifras de la Fiscalía General del Estado, de 2019 a julio de 2021, 52 jóvenes entre 13 a 17 años de edad se quitaron la vida; la mayor incidencia fue en 2020 con 24 casos; y el registro de este año es de 14.
La pandemia por el coronavirus también sumó muertes de la niñez en Chiapas, del mes de abril de 2020 al 17 de octubre de 2021, fallecieron 11 NNA, en su mayoría de cero a cinco años de edad.
Es necesario señalar que el incremento en las desapariciones de menores en Chiapas casi se triplicó en este periodo pasando de 183 en 2019, 384 en 2020 y 515 de enero a la fecha; solamente la mitad tienen reporte de localización.
Y hallaron a 10 menores sin vida (seis hombres y cuatro mujeres) que fueron víctimas de desaparición de 2019 a octubre de 2021.
70 NIÑAS VÍCTIMAS DE FEMINICIDIO
Desde el año 2011 a octubre de 2021, la violencia machista ha quitado la vida a 70 niñas y adolescentes en diferentes municipios del estado; el 43 por ciento de ellas son indígenas y los municipios donde ocurren con mayor frecuencia, son Tuxtla Gutiérrez, San Cristóbal y Tapachula.
En lo que va de este año, tres adolescentes de 14, 16 y 17 años fueron víctimas de feminicidio.
Asimismo, los NNA mueren diariamente a causa de la pobreza, las desigualdades y las diferentes expresiones de racismo y violencia. La tasa de mortalidad infantil (19.4%) por desnutrición, enfermedades diarreicas e infecciones respiratorias es la más alta del país (13.1%).
¡NO DEBIERON MORIR!
Bajo el lema “No debieron morir”, Melel Xojobal dio a conocer las lamentables y urgentes cifras, “prendemos una luz y traemos a la memoria a aquellas niñas, niños y adolescentes que murieron por causas prevenibles y evitables”.
Denunciaron la falta del Estado en el cumplimiento de la obligación de garantizar, promover y proteger el acceso a una vida libre de violencia y la seguridad de las infancias.
La organización también realizó una caminata por el centro de San Cristóbal este 1 de noviembre para recordar a las víctimas.
“A la vez hacemos un llamado para abrir nuestro corazón hacia una sociedad corresponsable de la crianza y cuidados de la niñez y romper con todas las formas de discriminación, racismo y xenofobia en su contra”.
De enero a septiembre del año 2020 al menos 934 niñas y niños han sido asesinados en México y según cifras oficiales, en el 70% de los casos se utilizó un arma de fuego.
“Que el espíritu de las niñas, niños y adolescentes nos oriente para seguir tejiendo alternativas de ternura, rebeldía y justicia social. ¡No debieron morir!”
