A. Marroquín / Diario de Chiapas
Al menos siete de los 150 estudiantes de nuevo ingreso de la Escuela Normal Rural Mactumactzá de Tuxtla Gutiérrez, notificaron baja escolar de este centro de estudios por persistir las denominadas “novatadas”, las cuales son inducidas por alumnos con más antigüedad.
Iris Valeria Suárez Ruiz, alumna de primer año de la Mactumatzá, dio a conocer que los 150 alumnos de nuevo ingreso siguen siendo objeto del proceso de inducción a las actividades propias de la escuela, tanto en lo académico como en la parte combativa; instrucción que ha estado a cargo de los estudiantes de mayor antigüedad, que en grupos mixtos de 15 a 20 jóvenes, los instan a memorizar y repetir las consignas e himnos que se entonan en marchas y actividades propias de los normalistas.
Suárez Ruiz manifestó que las 50 alumnas que ingresaron en el ciclo escolar 2021-2022, todas las noches son alojadas en un salón de clases, donde inicialmente les permitían descansar toda la noche, pero conforme avanzaron los días, a partir de las 02:00 de la madrugada, las obligaron a mantenerse despiertas y solo les permitían dormir dos horas, para memorizar y entonar consignas e himnos de lucha.
Además, comentó que durante su proceso de inducción, los alumnos de mayor antigüedad, les recalcaron que son “la escoria de la sociedad”, por lo que no merecían consumir alimentos ni líquidos, donde los obligaban a ingerir alimentos descompuestos.
De igual manera, refirió que sus compañeros los obligaban a realizar actividades físicas, tales como desplazarse y sumergirse en agua con lodo o excremento de cerdo, además de correr, saltar, arrastrarse en el piso; acciones en las cuales, no los dejaban descansar e hidratarse.
Puntualizó que en su caso y junto a 49 alumnas más, las obligaron a realizar diversas labores agrícolas, así como ejercicios físicos extenuantes, negándoles agua y alimentos, cuando se los proporcionaban, se los “escupían” obligándolos a su ingesta, situación que les originó deshidratación e insolación, como quemaduras solares de primer grado en su anatomía, tos disfónica, crisis de ansiedad y depresión.
Ante esta situación, declaró que por recomendación de sus padres, abandonó el centro de estudios para poder interponer una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE), por dichas conductas, las cuales, han originado que otros seis alumnos hayan desistido de proseguir su formación educativa en la Escuela Normal Rural Mactumactzá
