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Marco Alvarado / Edén Gómez Bernal / Diario de Chiapas

La pandemia de COVID-19 es un reto también para los arquitectos, de quienes ahora se espera que puedan proponer soluciones resilientes a través de espacios inclusivos, en los que la circulación del aire, de la luz solar y los espacios de convivencia, sean el eje central de sus proyectos, consideró el director general del Instituto de la Infraestructura Física Educativa del Estado de Chiapas (Inifech), Enoc Gordillo Argüello, durante la inauguración de la Duodécima Bienal de Arquitectura Chiapaneca 2021, organizada por el Colegio de Arquitectos Chiapanecos A.C. (Cachac).

Mónica Vudoyra Cruz, presidenta del Cachac, coincidió en que este encuentro debe servir para dilucidar de manera colectiva sobre el diseño de nuestro entorno construido y la ocupación adecuada de nuestro extenso y diverso territorio.

“Es una ventana para observar y ser observados, una puerta para proyectarnos de manera global, y también un espejo para replantear los nuevos retos en estos tiempos de pandemia”.

Ambos señalaron que tras la pandemia, la población necesita de nuevos diseños arquitectónicos que satisfagan las necesidades de los usuarios en este nuevo contexto, donde un mismo espacio sirve para vivir, para trabajar y para el esparcimiento.

La Duodécima Bienal de Arquitectura Chiapaneca 2021, es también un encuentro para reconocer el trabajo y desarrollo profesional de los arquitectos, destacando la aportación que hacen a la sociedad con innovaciones en infraestructura de calidad.

RECONSTRUCCIÓN LLEVA 2.5 %

DE AVANCE

Respecto al avance en la reconstrucción de la infraestructura física educativa luego de los fuertes sismos registrados en Chiapas, el director general del Inifech, Enoc Gordillo, indicó que se ha tenido un progreso del 2.5 por ciento.

Expresó que en Chiapas hay por lo menos 19 mil planteles educativos y que varios de estos no solo tienen daños por los sismos, sino también por poca atención y mantenimiento que data desde hace más de 40 años.

“Se están atendiendo las infraestructuras educativas, sin embargo, también hay que dejar algo en claro, no todo se le debe atribuir al sismo, sino también a la poca atención y mantenimiento que se tuvo por parte de los directivos de las escuelas, las autoridades municipales que se debieron hacer cargo de las instituciones o incluso por la falta de reportes que se tuvieron en su momento por parte de los comités de padres de familia”, señaló.

En el censo con que cuenta esta dependencia se contabilizan por lo menos 3 mil 067 planteles que tienen necesidad de atención, sin embargo, se va avanzando paso a paso considerando que el recurso no alcanza, ya que solo se tiene dinero para atender entre 350 y 400 planteles al año.

Gordillo Argüello mencionó que en los últimos tres años se han atendido a poco más de mil 100 espacios educativos, para lo cual se han invertido por lo menos 3 mil millones de pesos.

Refirió que para el próximo año no se prevé un aumento en el recurso, sin embargo, se ha trabajado para tener una mejor planeación que permita visitar las escuelas que así lo requieren y atender las escuelas que sí están dañadas.

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