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Desde mi Trinchera

Diego Victorio

Morena, ¡a elecciones!

Da la impresión de que en esta ocasión si están cuidando las formas. E, increíblemente, hasta son incluyentes.

Pareciese que no están actuando como esa rancia izquierda que fragmentó al Partido de la Revolución Democrática (PRD), y terminó por hundirlo.

Al menos ese juicio se produce en los imaginarios colectivos.

Yo tengo mis dudas y, aquí señalaré algunos argumentos que las sustentan: 

El 1 de julio se socializó, entre los que ellos llaman protagonistas del cambio, mejor ubicados como militantes, las nuevas reglas del juego para designar consejeros distritales, dirigentes estatales y líder nacional de Morena.

Hasta ayer nadie se ha atrevido impugnar la orden del Tribunal Federal Electoral del Poder Judicial de reponer el proceso electivo y subsanar la convocatoria, nadie.

Ninguna ala repara por que, el otrora TRIFE instruyó organizar las asambleas y el Comité Nacional acató sin contradecir la orden, en plena cresta de la pandemia por coronavirus.

Leyendo el ordenamiento del Comité Ejecutivo Nacional, que consta de veinte hojas, este está diseñado para que ni la epidemia sea causa de detención del proceso selectivo.

Y es que en un transitorio señala que, los consejos distritales podrán declararse válidos con la sola presencia de 50 militantes.

Por ejemplo, donde haya Distritos con dos mil miembros activos del partido guinda, bastará con la presencia de cincuenta para obtener la legitimidad, menos del 2%.

Causa suficiente para que las tribus antagónicas a los grupos de poder duden de las buenas intenciones y presunta generosidad de la dirigencia nacional interina.

Bajo ese término, la asamblea bien pudiera realizarse en un domicilio privado, a la vieja usanza, con tufo de corrupción y amaños.

Repite el patrón del pasado, toda vez que, esa risible cantidad de militantes, para avalar la asamblea, deja el escenario inmejorable al chanchullo y politiquería.

A ello atribuyo mis dudas.

Ahora bien, segmentando el tema al caso de Chiapas, llama poderosamente mi atención un complemento en la convocatoria: en ella podrán participar quiénes hayan obtenido la militancia, hasta junio de 2020, inclusive.

Con la eliminación de ese candado que aislaba a miles, la elección dará un giro de ciento ochenta grados.

Tropicalizando esa última adenda, arroja la lectura de cancha pareja para las cofradías que, pretenden agenciarse el liderazgo de Morena en la aldea.

Y, si me apura, beneficia a los neomorenos o agrupaciones consideradas como externas.

Por supuesto, que, en esa lógica, pone contra la pared a los fundadores, duros o conocidos intramuros como radicales quienes avasallaban, pues eran amos y señores del padrón de 2015, que ha quedado abrogado de las reglas de juego.

El 18 de julio y 9 de agosto son las fechas tentativas para someter a votación los cargos de consejeros distritales y dirigente estatal.

El 24 de agosto, el consejo ordinario nacional, elegiría las ternas que aspiren a la dirigencia nacional, este a su vez, será designado vía metodología de encuesta.

De no ser impugnada las bases y el proceso sigue su curso, habrá un país morenizado con ambiente electoral y, si, aun cuando el virus está en su punto de inflexión. Al Tiempo.

Comentarios Atrincherados

***Lamentable el deceso del dirigente estatal de Mover a Chiapas, Miguel Arturo Ramírez López. Otra víctima más de coronavirus.

Luz en su viaje al descanso eterno.

*** La Fiscalía General de Chiapas, informó de la detención de Diego Alberto Silva, uno de los implicados en el altercado en el centro de Tuxtla Gutiérrez, donde resultó con herida de bala Juan Carlos Armendáriz que, hasta ayer seguía prófugo de la justicia.

De este hecho, ya hay un saldo de dos detenidos y, uno más en calidad de evasor de la ley.

Jorge Llaven, cumple su palabra de que no habrá impunidad en Chiapas. Bien. HASTA PRONTO.

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