José Salazar / Diario de Chiapas
Ante la demostrada incapacidad y poca atención que el Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, le ha dado a la pandemia de coronavirus, esta ciudad se ha convertido en el centro poblacional con mayores casos de contagio y defunciones, todo bajo la mirada del presidente Carlos Orsoe Morales Vázquez, a quien dicha situación se le salió de control.
Ante el riesgo latente que corre la población, por el brote de contagios en el primer cuadro de la ciudad, fue necesaria la intervención de la Federación, situación que preocupa al gobernador del estado, quien instruyó a la Secretaría de Bienestar y a la Dirección Estatal para el Control de Riesgo Sanitario (Dipris).
Quienes este fin de semana iniciaron un operativo para supervisar e intensificar las medidas preventivas que el Ayuntamiento de la capital no ha realizado, porque el presidente municipal fuera de la propaganda, no predica con el ejemplo, y hasta a su propio personal dentro y fuera de oficinas los ha expuesto innecesariamente y sin medidas estrictas, lo que ha resultado ya en varios contagiados, casos que por lógica han tratado de ocultar.
Tuxtla se encuentra alerta porque actualmente, de acuerdo con las cifras presentadas por el secretario de Salud, el 36 por ciento de los casos de coronavirus y el 23 por ciento de las defunciones, se concentran en la ciudad, ya que desde el inicio del brote y hasta la declaración de los 21 días fatídicos de la pandemia, Tuxtla como capital, carece de un protocolo de acciones y medidas para evitar el contagio.
El alcalde no tiene tiempo para trabajar por las y los tuxtlecos, es notoria la falta de presencia efectiva de salud municipal; mientras el presidente municipal Carlos Morales se la pasa haciendo ‘su agosto’ y promoviendo su imagen para reelegirse o agarrar una diputación, que le ayude a evitar las demandas en su contra cuando deje el cargo actual, los casos incrementan.
Es desproporcionada y alarmante la expansión de los contagios en Tuxtla Gutiérrez, que la Federación ya lo señaló y es punto preocupante para Rutilio Escandón, al grado de que se destaca el que este fin de semana tuvo que intervenir.
