Jeny Pascacio/Diario de Chiapas
Además de la violencia y pobreza, en el 2020, el cambio climático y la crisis sanitaria por coronavirus se sumaron a los factores más importantes de la migración durante este 2021, según la documentación que realiza la organización Movimiento Migrante Mesoamericano.
De acuerdo al trabajo de Alba Alemán y Rubén Figueroa, las inundaciones por el paso de los huracanes ETA e Iota por Centroamérica agravaron la crisis social, que el año pasado había recrudecido por el coronavirus.
“En el refugio para migrantes ‘Casa Betania Santa Marta’, ubicado en Salto de Agua, Chiapas, han registrado que desde el mes de enero se ha triplicado la llegada de personas centroamericanas para solicitar hospedaje, comida o atención médica”.
En el mes de enero tres mil personas acudieron al refugio, mientras en el mismo periodo, pero de 2020, solo pasaron 660.
“En esta ocasión la gran mayoría de las personas que deciden salir de su país de origen lo están haciendo caminando, siguiendo la ruta del tren, el cual no se encuentra en funciones debido al inicio de la construcción del Tren Maya, por lo que se ven obligados a caminar por largas jornadas”.
Durante el 2020, a pesar de la pandemia, la migración no paró. De acuerdo al albergue “Una Ayuda para ti mujer migrante AC”, las personas dejaron a un lado las caravanas, pero siguieron llegando a territorio mexicano en pequeños grupos, más expuestos por caminos peligrosos.
En diciembre, las familias provenientes de Honduras, El Salvador y Guatemala llegaron buscando mejor calidad de vida, otras, una oportunidad para llegar a Estados Unidos. Las inundaciones los dejaron sin viviendas.
En el mismo mes, los hondureños convocaron a una caravana. Al menos seis mil personas intentaron cruzar la frontera entre Honduras y Guatemala entre el 15 y 16 de enero, pero la Policía Nacional Civil, con uso de la violencia logró contener la masa, pero no así los pequeños grupos.
El Instituto Guatemalteco de Migración, informó que al 20 de enero el gobierno de ese país había realizado el retorno de 3 mil 962 personas procedentes principalmente de Honduras, e incluyendo grupos más pequeños de salvadoreños y nicaragüenses.
Con la entrada de la primera caravana de 2021, en México, el Instituto Nacional de Migración desplegó un operativo por el río Suchiate y El Ceibo, donde lograron detener a los algunos integrantes de la caravana que no fueron contenidos en Guatemala.
Ayer, el gobierno de México volvió a desplegar un operativo comandado por Migración, Guardia Nacional, Sedena y Protección Civil. Usarán tecnología para vigilar puntos ciegos, con el argumento de una ‘migración ordenada’ poniendo en marcha las recientes reformas a Ley de Migración.
Para Michele Klein Solomon, directora regional de la OIM para Centroamérica, Norteamérica y el Caribe, los motores fundamentales de la migración desde los países del norte de América Central, como la pobreza, la falta de empleo y la violencia, no son nuevos, pero se han visto exacerbados por acontecimientos recientes, en particular la pandemia de COVID-19 y los huracanes Eta e Iota.
“En este contexto, la desesperación combinada con información falsa y engañosa, incluso sobre posibles cambios en las políticas migratorias, a menudo difundidos intencionalmente por contrabandistas de personas y otras organizaciones delictivas, alimenta grandes movimientos irregulares de personas en caravanas que buscan acceso a la seguridad y a las oportunidades en el extranjero”.
