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José Cancino/ Darinel Zacarías/ Suchiate

Al menos 350 elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) y unos mil integrantes de la Guardia Nacional se apostaron esta mañana en las márgenes del Río Suchiate, para estudiar los estragos de contención en torno al posible arribo de la caravana migrante. 

Las fuerzas federales fueron lideradas por el comisionado del INM, Francisco Garduño, quien viajó a la franja fronteriza para analizar la movilización.

Mientras tanto, la caravana migrante se ha dispersados en dos grupos, que han tomado rutas distintas: unos hacia El Petén y los otros a Tecún Umán, San Marcos, según revelan miembros de la caravana.

Los patrullajes se mantienen de manera constante en la cabecera municipal de Suchiate, ante la posibilidad que comiencen a arribar pequeños grupos en paso hormiga.

Los gendarmes mantienen algunos puntos de revisión y solicitan papeles a las personas que buscan ingresar a territorio mexicano.

El despliegue militar ha durado apenas 30 minutos, después todo el contingente se ha movilizado a las bases de operación en Tapachula y en Ciudad Hidalgo. 

Se prevé que sea este sábado y domingo cuando la caravana se asome a la frontera desde San Marcos con el sur de Chiapas. 

La Guardia Nacional, Policía Federal y Policía Municipal de Suchiate mantienen recorridos en, al menos, 30 colonias de Suchiate, mientras que un puesto de control ha sido instaurado en la salida a Tapachula, por la carretera principal. 

Francisco Garduño, titular del INM, declaró esta tarde que no se permitirá el ingreso a México de grupos que lo intenten por la vía ilegal. 

“El llamado que yo hago a los migrantes centroamericanos que salen por necesidad de sus país de origen, es que se apeguen a las leyes mexicanas”, recalcó.

El paso de mercancías persiste en el río Suchiate, pero el número de balsas ha aminorado.

Caravana de la “Desesperanza”

Esta caravana está conformada por unos tres mil migrantes, misma que partió de San Pedro Sula, Honduras hace un par de días. 

Este éxodo humano está conformado por niños, mujeres y hombres; un primer contingente se adelantó y partió el mismo miércoles 30 de septiembre y el otro contingente salió alrededor de las 2:00 de la madrugada de este jueves por la mañana.  

Como lo habían programado, hicieron su arribo al punto fronterizo de Corinto, entre Honduras y Guatemala, irrumpiendo y causando destrozos en esta garita migratoria.

 

La última actualización del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) la tarde del jueves, señalaba que tres mil integrantes de la caravana de migrantes ingresaron al territorio guatemalteco pero la mayoría burló los controles migratorios. 

De inmediato en territorio mexicano, el INM emitió un comunicado que advierte sanciones a personas extranjeras que ingresen al país sin las medidas sanitarias derivadas del SARS-CoV-2. 

Dicha advertencia incluye a toda autoridad civil, militar y particular que utilice las instalaciones del INAMI y áreas de internación en el país, ya que todos deben de cumplir protocolos de salud; añade además que existen penas de cinco a 10 años de prisión a quien ponga en peligro de contagio la salud de otros. 

El gobierno de Guatemala, dispersó la presencia de la Policía Nacional Civil de ese país para impedir el acceso, toda vez que mantiene la postura de exigir las pruebas PCR de laboratorio que garanticen que los extranjeros no están contagiados con Covid-19 y así puedan internarse a territorio chapín.

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