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  • Cientos de visitantes disfrutaron de la máxima fiesta coiteca, luego de dos años de pandemia

Edgar Ruiz / Corresponsal Diario de Chiapas

Ocozocoautla, Chiapas.- Las emociones estuvieron al máximo en el regreso del Carnaval Zoque Coiteco, y es que fue notoria la ansiedad de la gente por volver a festejar la máxima festividad del pueblo, tras dos años suspendidos por pandemia.


El parque central se abarrotó de cientos de visitantes que se congregaron para disfrutar del tradicional desfile, por lo que elementos de seguridad se desplegaron por toda la zona para garantizar la integridad de las personas y de los participantes en esta fiesta.
El desfile dio comienzo con Sofía I, Reina del Carnaval, quien lució un atuendo memorable, apegado a la tradición, con un carro alegórico que tuvo el rostro de los Monitos, reconociendo al cohuina que le dio la oportunidad de convertirse en la monarca de la tradición.


Los chores fueron los que llamaron poderosamente la atención con sus trajes multicolores, algunos recordando la tradición autóctona, mientras que otros haciendo gala de su creatividad para divertir a la gente, con vestuarios más elaborados y muy vistosos.
Sorprendieron que niños y niñas también forman parte de la fiesta, pues desde muy pequeños buscan involucrarse en esta cultura y tener buenos recuerdos de la fiesta zoque.


Por su parte, las mujeres le dieron el toque esencial de la belleza, luciendo sus trajes típicos de la cultura zoque, en donde su papel es fundamental para la alegría, denominadas como Correlonas, ya que le dan el sabor emotivo a la fiesta.
Fueron cerca de cinco horas de desfile en donde pasaron los seis cohuinas dando muestras de sus danzas con sus personajes principales, haciendo sonar el jule jule y los vivas, todo al ritmo del tambor y el Carrizo, además de que no pudo faltar la música de marimba.


Durante el desfile fue emotivo ver homenajes a los trabajadores de la pirotecnia, recordando el accidente que sufrieran hace unas semanas en donde perdiera la vida un joven.
También hubo un homenaje por un grupo de correlonas a Tía Manuelita, una mujer que fundara su Taquería y que sea reconocida por el pueblo por su sazón, y quien recientemente perdió la vida.


El talco voló por los aires, la música puso a todos a bailar, y las emociones fueron subiendo de nivel en este domingo en que regresó la máxima fiesta del pueblo.

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