María Elena Rovirosa
La falta de ritmo nos provoca un desánimo emocional, que si bien no tenemos una mente entrenada para los cambios repentinos, es productora de la fatiga. Podemos nutrirnos con las ideas de grandes pensadores, quienes a través de experiencias cumbres nos aportan rutas emergentes, como si a la letra se insertase para continuar, nuestro ánimo de entrenamiento mental y así, poder adaptarnos a la variación de las etapas que estamos viviendo en esta contingencia de salud.
Nuestra mente posee dos hemisferios, mismos que mantenemos en arduo trabajo diariamente. Uno es el encargado de los números y letras, mientras que el otro, reconoce los lugares o sitios. De esta forma, podemos apreciar la unión del trabajo colectivo en nuestro cerebro. Un Entrenamiento Mental, es un proceso de dinámicas estructuradas para habilitar el redescubrimiento de nuestro Ser Interior. Es la reinterpretación para identificarnos como verdaderos ciudadanos congruentes.
Procura conquistar para tu vida el encanto de la armonía; contigo mismo, con tus semejantes y con cuanto te eleve o magnifique. Una armonía que sea equilibrio de tu Ser, de tu paz y de tu fuerza, que se refleje en tu mirada y en tu expresión, confianza y bondad; que te relacione más y mejor con los seres y con las cosas; que plasme tu virtud y tu esfuerzo en una obra de utilidad y trascendencia. Que deje las huellas de tus pasos para un futuro prometedor de la generación que de ti vendrá. Con una armonía así, serás como un imán que atraerá la buena fortuna de un diario vivir genuino. Sentirás confianza, porque de todo cuanto ya tienes, fuerza, paz y contento, surgirá naturalmente esa seguridad en ti mismo que te hará invulnerable ante las asechanzas; forjarás bondad, porque has de resaltar como humano, donador de bienes anímicos, influenciante sobre las voluntades, vinculador con todos, principalmente con aquellos que más te necesiten. Ascenderás así, por la armonía de que hablamos, a una de las mejores excelencias: la de poder dar luz, consuelo y pan. Yo Soy
