Llama gobernador a respetar la ley electoral
El llamado que el gobernador Rutilio Escandón Cadenas hizo a los miembros de su Gabinete legal y ampliado, relacionado a que respeten el proceso electoral rumbo a junio 2 de 2024, tiene un punto referencial que hay que tomar en cuenta y en la que prácticamente les advirtió, haciendo una interpretación de su mensaje: “Allá ustedes si se portan mal, pues han quedado notificados que no deben inmiscuirse, ya que, de lo contrario, caerá sobre ustedes todo el peso de la ley”.
Oficialmente en campaña rumbo al Senado de la República y a la presidencia de la República, el gobierno ha emitido la “alerta” de que se tiene que acatar la veda electoral, por lo que ningún funcionario estatal, federal o municipal, debe estar perdiendo el tiempo inmiscuyéndose donde no debe, aunque lo hayan llamado exprofeso.
El exhorto tajante del gobernador a los servidores públicos de no hacer cosas malas que parezcan buenas en realidad no debería de hacerlo, pues ya tienen el conocimiento de qué sus funciones no deben mezclarse con lo que establece el artículo 41 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que a la letra dice que “los servidores públicos deben abstenerse de participar en asuntos de campañas políticas, a menos de que renuncien a su cargo en el gobierno”.
Lo cierto es que el mandatario, aprovechando que se reúne cada 15 días con todos los funcionarios de primer nivel, los convocó a que bajen dicha información a sus directores, subdirecciones, jefes de departamento y demás rangos que se tienen en la administración pública estatal.
La elección del domingo 2 de junio tiene un gran reto previo a esta convulsionada jornada que vivimos de inseguridad en la mayor parte del país y es que los mismos candidatos y candidatas logren convencer al electorado para que salgan a emitir su sufragio.
En otras elecciones registradas en el estado de Chiapas, por ejemplo, los problemas que se habían presentado por la supuesta ola de inestabilidad en algunas zonas, no intimidaron a la población para salir en el 2018 a emitir su voto.
Cierto es que han pasado tres años y la situación ha empeorado, por lo que los escenarios no se ven halagadores para llevar la fiesta cívica en completa tranquilidad. El Instituto Nacional Electoral, identificó, hace apenas una semana, que existen por lo menos tres distritos electorales donde no se logre la instalación de las casillas.
Es indudable que parte de tener una jornada en paz, dependerá del trabajo político que haga la Secretaría de Gobierno, y ojalá así sea, pues se han tenido experiencias malas donde la violencia e ingobernabilidad han reinado, pese a los titánicos esfuerzos por el gobierno para apaciguar los ánimos.
Sobre todo, ahora que acaban de salir las listas para la nominación de candidatos a las diputaciones locales y federales. En realidad, en este sector no se vislumbra problema serio que ponga a temblar a las dirigencias partidistas.
Lo que los tiene con el “Jesús en la boca” es lo que puede presentarse en los municipios, donde realmente está el termómetro de la contienda electoral pues muchos de los que serán elegidos y registrados para las alcaldías no tienen la representatividad en el partido que los postule.
De ahí que el cabildeo que se realiza en Morena desde hace tres semanas no termina por convencer a las dirigencias, pues están sabedores de que habrá problemas. El retraso en la designación de los políticos que asumirán la candidatura es el reflejo de que no hay consenso.
Si en verdad se respetaran las encuestas no habría problemas, y hasta el mismo aspirante sabedor que no fue el elegido, no la haría de problema. Sin embargo, la “mano negra” en las encuestas tiene a Morena y a sus aliados en una espera que huele a tufo podrido.
Por lo pronto, el gobernador hace su chamba reconviene a los servidores públicos, aunque algunos como el titular de la Auditoría Superior del Estado, José Uriel Estrada Martínez, desobedece y hace hasta lo imposible para que los ahora “palomeados” lo cobijen, dándole aunque sea una “pluri”, pues su gente de confianza cuenta que a tres meses de la elección, tiene pesadillas porque su futuro lo visualiza con vestimenta naranja, y no propiamente porque Movimiento Ciudadano le haya dado cabida para blindarlo, sino porque el Amate lo espera.
Ojalá el resto de los funcionarios acaten el llamado del gobernador Rutilio Escandón Cadenas de que se tengan elecciones de manera libre, “con igualdad para todas y todos y se respete la democracia».
