Francisco Mendoza/ Diario de Chiapas
Martín Mundo Molina, agremiado e investigador del Colegio de Ingenieros Civiles de Chiapas A.C., habló sobre el análisis que el colegio en coordinación con la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Chiapas y la Asociación Mexicana de Hidráulica, realiza desde 2018 en el embovedado de San Roque, enlistando 10 alternativas para minimizar el riesgo.
Dijo que pese a la intervención que ha hecho la autoridad municipal en la zona que colapsó en 2016, se han encontrado 59 nuevos socavones y tres zonas de riesgo hacia la zona cercana a la Plaza del Mariachi.
Refirió que la severa deforestación y la rebasada capacidad hidráulica en el río Sabinal ocasionará que a futuro (sin que se pueda vaticinar una fecha), dicho afluente vuelva a desbordarse, de ahí la urgencia de proyectos que minimicen el riesgo.
Explicó la necesidad de reglamentos en los que cada municipio tome en cuenta sus características específicas, así como la existencia de nuevos socavones detectados en el embovedado en San Roque.
Señaló de ahí la importancia de incidir en el tema de la reglamentación en seguridad, equipamiento y construcción, ya que muchas de ellas están obsoletas, desactualizadas o inexistentes, por ello, buscan el acercamiento con el Congreso del Estado y municipios, para abordar la necesidad de tener vigente un Atlas de Riesgo, Reglamentos de Construcción y normas complementarias, recordando que menos del 10 por ciento de ciudades de Chiapas cuentan con dicha normativa.
