El senador Samuel García fue abucheado por empleados de Pemex, quienes dañaron su camioneta, al clausurar de manera simbólica la refinería de Cadereyta en Nuevo León.
El legislador de Movimiento Ciudadano acudió acompañado de miembros de organizaciones civiles para visibilizar que los contaminantes que emite la refinería de Cadereyta están ‘envenenando’ y ‘matando’ a la gente de Nuevo León, y que esto se puede evitar.
Señaló que el dinero, tanto de los mexicanos como de los trabajadores, se ha perdido en actos de corrupción dentro de Petróleos Mexicanos y sus sindicatos, cuando podría usarse en modernizar la refinería e instalar filtros para los contaminantes que emite.