Desde hace algunos meses la forma de vivir cambió drásticamente tras la pandemia de COVID-19.
Ya no es seguro salir a la calle sin cubrebocas, guantes y hasta lentes.
¿Qué pasa si uso un gel antibacterial que ha caducado?
Pensando en esta nueva realidad, diseñadores italianos crearon un protector facial inflable para ser usado después del aislamiento preventivo.
Se llama ‘Soffio’ (soplo en español) y tiene como objetivo que las personas puedan recuperar la cotidianidad de manera segura.
La curiosa máscara se sostiene en una estructura inflable hecha de PVC y queda ubicada a una distancia suficiente para que quien lo usa pueda comer y beber, explicó Annalisa Grasselli, de MARGstudio, a la revista Dezeen.
Los diseñadores esperan que su invento —que puede ser fabricado por menos de un euro cada uno— facilite a los restaurantes y bares su reapertura después de la pandemia.
