Marco Alvarado / Diario de Chiapas
El parque Centro de Convivencia Infantil reabrirá sus puertas este viernes 22 de octubre, como lo acordaron las autoridades municipales y los concesionarios ayer, luego de un recorrido de inspección en las instalaciones.
Rita Elena Fausto Calderón, representante de los concesionarios, recordó que el cierre en los últimos dos años y medio afectó a 54 familias, tiempo en el que no hubo voluntad de atender las diferencias planteadas a raíz de un intento por modificar las rentas.
“Queremos trabajar, que nos permitan hacerlo y un primer paso es que abramos las puertas sin que nos condicionen, también que se aclaren las especulaciones de supuestas deudas con el ayuntamiento”.
Este parque, uno de los más conocidos en la capital, fue cerrado desde el año 2019, y se mantuvo así con el argumento de la pandemia, porque los concesionarios se inconformaron con una modificación que alteraba los últimos 20 años de trabajo, como lo explicó el representante legal, Javier Opón, al recordar que el conflicto escaló a raíz de que el ayuntamiento cerró la ventanilla de cobro hace tres años.
“El problema empezó cuando en 2019 cerraron la ventanilla a los concesionarios, aunque muchos continuaron sus depósitos mensuales. Si hay adeudos en parte es responsabilidad del gobierno que no dio las facilidades, porque querían presionarlos para firmar un nuevo convenio como arrendatarios, cuando el comodato actual prohíbe tal fin”.
A decir de Rita Elena Fausto Calderón, secretaria de la Unión de Concesionarios de Convivencia Infantil, no hubo ningún intento de diálogo o mesa de concertación para informar sobre la decisión unilateral. Sólo se les notificó que deberían pasar a firmar los nuevos contratos para mantener sus espacios de trabajo en el parque.
Lo que se pretendía, explicó, no solo era quitarles la concesión para convertirlos en arrendatarios; la nueva modalidad de pago era por metro cuadrado, con rentas que podían superar los 300 mil pesos mensuales.
Un problema que parecía no tener solución hasta que el domingo 10 de octubre, en un claro abuso de autoridad, el secretario de Desarrollo Social municipal, Miguel Ángel Zárate Izquierdo, irrumpió en plena noche, aparentemente en estado de ebriedad, para intentar desmantelar algunas zonas de juegos o atracciones y luego utilizar su automóvil como arma contra personas que intentaban detenerlo, hechos que fueron grabados y culminaron con la destitución del funcionario.
Este martes, la secretaria general del ayuntamiento, Karla Burguete, junto con otros integrantes del Cabildo, recorrió el parque para verificar las condiciones, trabajos de mantenimiento que se necesitan y las peticiones de los afectados, con quienes concretaron el acuerdo de reiniciar las actividades el próximo 22 de octubre, observando las medidas sanitarias en las áreas comunes.
