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Opinión

¡parálisis de gobierno!

1.- Dónde están los 400 mil millones que servirían para atender la pandemia.

2.- Se acabó el dinero y se requiere para enfrentar la crisis económica del segundo semestre del año.

3.- Se reducirá la estructura del gobierno federal

Jorge Enrique Hernández Aguilar

Por lo que se observa en México, desde el 2019 se han venido tomando decisiones al calor del momento sin tomar en consideración efectos y consecuencias.

Los pocos equilibrios que quedaban al interior del equipo presidencial, que intentaron evitar este tipo de decisiones fueron apabullados al extremo de que más de alguno se conserva en el equipo, pero otros han optado por renunciar.

De pronto la transformación fue asumida como una revolución, en la que el tiempo jugaba un papel importante, por lo que había que darle prisa a algunas decisiones como la cancelación del aeropuerto de Texcoco en dónde se dijo que se pagarían las indemnizaciones correspondientes, pero que se suspendería de manera definitiva la obra.

También se habló de que la cancelación tenía que ver con la corrupción, pero nada se investigó y tampoco nadie está bajo proceso penal por corrupto.

Alguien le vendió la idea al presidente Andrés Manuel López Obrador, de reducir los salarios y hacer recortes como parte de una política de austeridad, en donde se decía que nadie podría ganar más de 108 mil pesos, que es el salario del presidente.

En fin, que llevaron de la mano al presidente con la intención de hacer que Pemex retomara su lugar como principal fuente de ingresos de la economía nacional, solo para descubrir la gran industria ilegal del huachicoleo, que a la fecha sigue sin poderse controlar.

Se otorgó dinero a Pemex, a fondo perdido, porque los resultados han sido las conocidas cifras de pérdidas trimestrales.

Se declaró que se darían a conocer nuevos decretos de austeridad, pero que se mantendrían las obras del sexenio y los programas sociales.

Llega la pandemia y con ella llega la catástrofe financiera, al extremo de que un sistema nacional de salud en la ruina demanda altas inversiones para responder a la epidemia.

Se descubre que había necesidad de todo, de hospitales, personal de salud, de equipo, etcétera.

Falso que México estuviera preparado para enfrentar una pandemia de tal magnitud.

Hasta ale momento no se saba ciencia cierta, de cuanto es el monto de lo que hasta ahora se ha gastado. Cuánto ha costado la compra de insumos a EU y China.

A pesar de estos días que resultan difíciles, que se dice pronto vamos a superar, ahora a la crisis sanitaria hay que sumar la crisis económica, por el gran impacto de los cierres de las empresas y la perdida de los empleos.

Ahora se ha vuelto a anunciar una nueva austeridad, con recortes salariales, reducción del gasto público, y esto ya advierte una posible parálisis de la administración pública.

Consideran algunos analistas que uno de los impactos negativos que ha tenido la epidemia del COVID19 se encuentra en la reducción del margen de maniobra presupuestal que tiene el Gobierno Federal; en efecto, los niveles esperados en la caída en la economía han llevado al planteamiento de nuevos recortes presupuestales que pueden llevar a la semi parálisis o a la parálisis de áreas completas de la administración pública.

A pesar de que el presidente de la República ha mencionado en diferentes ocasiones que dispone de más de 400 mil millones de pesos extraordinarios para enfrentar la emergencia, la HYPERLINK «https://www.gob.mx/shcp» «_blank» Secretaría de Hacienda anunció la semana pasada un nuevo recorte presupuestal de 75% en todas las partidas de materiales y suministros, así como de servicios generales de todas las dependencias del Gobierno Federal, excepto las de las áreas de salud y seguridad nacional y seguridad pública.

De acuerdo con el “Analítico por objeto de gasto” del Presupuesto de Egresos de la Federación, 2020, presentado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el monto total de los llamados Capítulos 2000 y 3000 de los presupuestos institucionales de 16 dependencias federales, asciende a 55 mil 416 millones de pesos. De esta suma, dividiendo en partes iguales cada mes del año, hasta mayo del 2020 debieron haberse ejercido alrededor de 23,090 millones de pesos, restando para el periodo junio-diciembre 2020, una cantidad de 32,326 millones de pesos. Si el recorte mencionado del 75% se aplica a esa cifra, el monto es de 24,244 millones de pesos, quedando para la operación de todo el gobierno de la República una suma de 8,081 millones de pesos.

Esta es la razón por la que algunas instituciones que forman parte de la estructura de gobierno, desde ahora se están pronunciando por cerrar oficinas en las entidades federativas, y recortar personal, así como reducir sus actividades.

Ni siquiera pensar que con su salario los titulares de las dependencias podrían financiar sus gastos de viaje, porque se los siguen reduciendo.

Si se sigue insistiendo en la austeridad, ya no tarda en declararse la parálisis, acompañada del desempleo, en la administración pública.

La situación se va a poner peor, si el presidente Andrés Manuel López Obrador, no acepta finalmente que debe recurrir al financiamiento internacional y se sigue aferrando a los decretos de austeridad que ya no son suficientes como asegura Alfonso Ramírez Cuéllar.

En un mes más se podrá observar el fenómeno de la parálisis, de las exigencias de empleo, de la crisis en los presupuestos institucionales que se han tenido que reducir al extremo.

La crisis económica se habrá de equiparar a la crisis sanitaria, claro sin muertos ni contagiados.

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