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Desde mi Trinchera

Diego Victorio

 

Granda: el bateador emergente.

Existe un diez por ciento de candidaturas -de Morena- indefinidas o encorsetadas.

El punto medular de este caso es que en esa fracción minúscula se encuentran las cabeceras de Distrito y las tres ciudades más importantes de Chiapas.

Y, los acuerdos no avanzan porque todas están supeditas a la negociación que se logre en la candidatura a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez, que ha caído en un impasse.

La expresión del radicalismo se muere en la raya sosteniendo la aspiración de Marcelo Toledo Cruz, pese a sus diez puntos porcentuales en la demoscopia.

Los “ultras” se han pertrechado en defensa de su camarada Marcelo.

Un grupo liderado por voces como las de Bertha Luján y Plácido Morales, se han infiltrado a través de testaferros (el Secretario de Transporte Aquiles Espinosa García) a la mesa de negociaciones aldeana para impulsar la candidatura del desmejorado edil capitalino Carlos Morales Vázquez, usando de argumento encuestas cuchareadas y financiadas por el cabizbajo alcalde tuxtleco.

Haga de cuenta que se trata de dos fuerzas antagónicas que no ceden ni cederán un centímetro en sus posturas.

No hay oficio, ni cordura, menos diálogo, todo lo contrario.

Esa obcecación no solo complica que exista un pacto armonioso en torno a Marcelo o Carlos, sino que traslada sus remanentes a las candidaturas de Tapachula y San Cristóbal De Las Casas que, están sin resolverse.

Y es que, en caso de que Marcelo no fuera el candidato, por default, los fundadores se harían de las candidaturas del Valle de Jovel y la Perla del Soconusco.

Y viceversa, si Marcelo Toledo logra coronar su sueño, en automático, los duros cederían Tapachula y San Cristóbal.

Esa pugna endémica en la izquierda radical no atrajera el interés del análisis si el plazo límite de inscripción de candidaturas no concluyera ya en nueve días.

La premura es ahora el factor que presiona a todos los actores que se sientan por las noches en la mesa más influyente de la aldea.

Una salida de emergencia, que aquí adelanté la semana pasada, pondría fin al exacerbado ambiente entre morenos: una tercera opción.

El nombre de Felipe Granda Pastrana es ya una alternativa real. Un instrumento que serviría para que los acuerdos transiten.

En la ecuación que se analiza en el cónclave guinda Granda Pastrana sería el candidato de Morena a la alcaldía.

Marcelo Toledo Cruz, sería el abanderado en el Distrito federal IX y Carlos Morales Vázquez iría a una demarcación local.

De consumarse los consensos, mañana mismo se desazolvaría el canal vino tinto que, se atascaba y daba visos de que se esfumaban los afectos y los buenos modales. Al Tiempo.

 

 

Comentarios Atrincherados

*** El que está construyendo un proyecto ganador en Berriozábal es Daniel Torres. Suma todas las expresiones y afina el tema territorial. Sígalo de cerca.

 

*** En Playas de Catazajá se va a romper el cacicazgo y será Cristian Damas el que logre la hazaña.

Un joven con entusiasmo sin antecedentes y con calificaciones muy altas de aprobación.

Morena, es su carril.

 

*** En Cintalapa, Antonio Valdez Meza es sin duda el perfil que más votos garantiza a los partidos. Valdez, es codiciado por más de tres institutos políticos que ya le pusieron la candidatura en la mesa, sólo falta que el estampe su firma.

Ha hecho una precampaña discreta sin que los adversarios conozcan sus fortalezas.

El silencio de “Toño” también comunica. De último minuto podría sorprender a propios y fuereños.

 

*** Alberto Cundapí Núñez, no detiene su caminar. Lleva a cada hogar el mensaje de la Cuarta Transformación.

Cundapí, es el personaje idóneo para que Morena cumpla con su narrativa de que impulsa candidatos honestos.

Va en busca de una curul local.

 

***En Mapastepec Nicolás Noriega, está a nada de ser el ungido de Morena a la alcaldía mapaneca. HASTA PRONTO.

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