Marco Alvarado/ Diario de Chiapas
Los panteones son la esencia de las festividades del 1 y 2 de noviembre en el país; sin embargo, este año debido a la emergencia sanitaria se espera una caída en la visita de las tumbas familiares.
No obstante, datos recientes muestran el impacto de la pandemia en estos lugares, pues las inhumaciones aumentaron hasta en 20 por ciento en los últimos meses.
También los llamados “camposantos” y “la última morada” están distribuidos en las zonas metropolitanas del país, en una cantidad de mil 406 panteones administrados por los gobiernos municipales.
De acuerdo con el último estudio del Inegi, en cuanto a los espacios contabilizados hasta el año 2019, a nivel nacional, de los seis millones 99 mil 547 fosas o tumbas, sólo 16.7 por ciento está disponible.
Ahora bien, el impacto actual de la pandemia ha quedado evidente en las recientes estadísticas, pues entre enero y junio de 2020 aumentó 20.2 por ciento; en tanto, la cantidad de cadáveres cremados o incinerados registró un aumento de 76.8 por ciento.
Conforme a los datos publicados por la Secretaría de Salud, del 4 de febrero de 2020 al 30 de junio de 2020, se registraron 27 mil 769 defunciones por Covid-19.
