Xóchitl Gálvez, ¿el as que «Va por México” estaba esperando?
Desde el lunes, cuando apenas aclaraba el día, minutos después de que no la dejaron entrar a Palacio Nacional para asistir a “La mañanera”, para ejercer su derecho de réplica, la senadora Xóchitl Gálvez ya tenía como mínimo una veintena de solicitudes de entrevista en igual número de medios de comunicación. La razón era para que diera pormenores sobre el rechazo a la orden de un juez.
El año pasado, a finales, realizó, en una conferencia de la Feria de la Universidad de Guadalajara, unas declaraciones sobre los programas sociales, pero el presidente de México le reclamó que ella había pedido que se quitaran. Eso nunca dije, respondió, al contrario, yo no estoy en contra de que se den apoyos, cuando mi herencia proviene de un pueblo muy pobre, ubicado en el estado de Hidalgo.
Fuera de este prólogo, la senadora, sin tener un solo cartel o espectacular que cuelgue en algún lugar de la Ciudad de México o del país, es quien encabeza las encuestas para gobernar en 2024 la ciudad más grande del territorio mexicano. Asegura que fue el propio presidente de México quien la destapó.
Lo novedoso es que, desde este lunes, varios periodistas dieron la nota de que Xóchitl Gálvez podría ser considerada como la carta fuerte que podría ganarle a la corcholata de Morena. Dar un salto indescifrable pondría en los cuernos de la luna a la senadora y la preocupación del partido en el poder sería más que evidente.
Hasta ahora a ningún dirigente de partido que componen la alianza Va por México se le ha escuchado decir que ella podría ser la candidata como el as que estaban esperando.
Es una mujer preparada, valiente, sin pelos en la lengua para criticar o sostener su verdad. Incluso al ex presidente Vicente Fox, con quien laboró en su gabinete, le puso trabas a sus órdenes. Hoy es una mujer visible, empoderada, pero muy humilde. No presume lujos, se traslada por la ciudad en bicicleta. En las ultimas batallas de las sesiones del Senado se vistió de dinosaurio para mofarse de sus adversarios políticos.
Además, por si fuera poco, es la única que ha tenido las agallas para iniciar un pleito en los tribunales contra el primer mandatario del país, y hasta donde va esta trama, la lleva de gane. Tan es así que ella misma se ha sorprendido de los miles de seguidores que en menos de 24 horas obtuvo en sus cuentas personales de redes sociales.
Con esto no quiere decir que fijamos posición con la senadora, porque nuestra misión es ser imparcial en los procesos democráticos, pero sorprende que la mujer que, en más de una ocasión a mentado madres en sus intervenciones públicas, tenga hoy el respaldo ciudadano para encabezar causas sociales.
De hecho, en este espacio se ha dado entrada a todas las corrientes políticas y personajes que los representan, por ello la aparición sorprendente de quien se dice una mujer “terca”, “cabrona” e insistente en lo que se propone ya debió poner a reflexionar a los líderes de los partidos PAN, PRD y PRI.
De esta manera, dentro del mismo panismo la situación se pone tersa para otros aspirantes como Santiago Creel, Damián Zepeda, Lily Téllez, como las cabezas visibles a ganar la candidatura.
Con el paso del tiempo, desde noviembre para este mes, el presidente de México se ha vuelto el principal promotor de la imagen de Xóchitl Gálvez. Se ha equivocado al denostarla, al señalarla que busca popularidad, que anda en campaña. Sí así fuera, vaya madruguete que le ha dado la senadora sin gastar un solo peso en promoción.
El error del mandatario Andrés Manuel López Obrador ha sido no haber reconocido sus infortunadas, más no graves, declaraciones. Debió echarle la culpa al canal que le dio la información tergiversada sobre la “desaparición de los programas sociales”.
Hoy la hidalguense está más fuerte que nunca, quien, sin arrogancia, reconoce que pensará la propuesta que le han metido en la cabeza de cambiar la Jefatura de Gobierno por la Presidencia de México, pues no tiene mucha experiencia para combatir el tema de la seguridad, por ejemplo, pero en todo caso se haría de expertos en la materia que la ayuden. No tiene complejos de inferioridad.
“Yo siempre he dicho que ni con rateros ni con huevones ni con pendejos. Con gente capaz, honesta y trabajadora, claro que sales adelante”, dijo en una de las tantas entrevistas a los medios. En 15 días, dice, se decidirá por dónde se decide a competir y dónde sería más útil.
