Letras Desnudas
Mario Caballero
Para cualquier gobernante siempre es un reto mayor conquistar la confianza de la ciudadanía. Pero en el caso del gobernador Rutilio Escandón parece un asunto resuelto desde hace algún tiempo. Y no es extraño, ya que por el solo hecho de que haya fijado el combate a la corrupción como eje medular de toda la administración pública estatal aumentó la confianza y el acuerdo social. Por eso hoy es uno de los gobernadores mejor calificados del país.
Don Rutilio es un hombre sencillo, humilde, muy sobrio y con una profunda vocación de servicio. A pocos días de cumplir cinco años de administrar el estado, me atrevo a decir que es un gobernante con un liderazgo político sólido y un ejemplo de lo que se debe hacer. ¿Por qué?
En primer lugar, su mensaje de gobierno fue desde un inicio enfrentar la inseguridad y recuperar el Estado de derecho. Y no quedó sólo en el discurso, sino además de implementar las acciones necesarias para alcanzar esos objetivos, también generó propuestas que le dieron prioridad al desarrollo, el combate a la pobreza y la gobernabilidad.
¿CÓMO PODÍAMOS CONFIAR?
La confianza es una construcción muy compleja de llevar a cabo, difícil de ganar y fácil de perder. No por nada Chiapas fue uno de los estados de la República con un alto grado de desencanto por la política, donde tan sólo el gobernador anterior dejó el cargo con una aprobación social de 18.3 por ciento, una cifra ridícula comparada con la votación histórica que obtuvo al ganar la gubernatura.
La desconfianza que generó este exmandatario, igual que los dos anteriores, tiene sus bases en las malas prácticas del poder, el autoritarismo, la corrupción y la impunidad que los identificó como gobernantes.
Por ejemplo, ¿cómo confiar cuando vimos a un exgobernador que se negó a prestar el helicóptero del gobierno para trasladar a más de treinta niños recién nacidos que terminaron perdiendo la vida entre diciembre de 2002 y enero de 2003 en un hospital público de Comitán que carecía de los recursos para brindarles la atención que necesitaban?
¿Cómo confiar cuando vimos a otro gobernador y a un presidente de la República embrutecerse de alcohol horas después de haber estado donde un deslave de tierra sepultó el pueblo Juan del Grijalva? ¿O cómo confiar cuando dos exgobernadores hicieron lo que les vino en gana con los recursos destinados a la reconstrucción por los daños causados por el huracán Stan y el terremoto de septiembre de 2017?
Simplemente, no se podía.
CLAVES
Así que no es un asunto menor que el gobernador Escandón Cadenas haya afrontado el reto de construir confianza entre la ciudadanía y devolverle a la gente las ganas de creer en la política.
El reto, obviamente, no ha sido una labor sencilla. Una de las primeras acciones realizadas por Rutilio Escandón fue alejarse de los vicios, las frivolidades y las corruptelas que caracterizaron a los anteriores gobernantes. Ahora no hay despilfarro, sino un correcto uso de los recursos públicos; no hay lujos, sino austeridad. Los helicópteros y demás aeronaves están al servicio de los chiapanecos, es decir, para el traslado de enfermos graves y otras acciones prioritarias para la sociedad. No como antes que servían para que las amantes pasearan y los amigos de los gobernadores se emborracharan en el aire.
Por otro lado, el dinero de los chiapanecos está siendo invertido en la reconversión de los hospitales públicos, en el sector educativo, en seguridad y en el pago de la deuda heredada.
Otra acción que ha dado buenos resultados fue imponer el Estado de derecho y la legalidad, que ha sido determinante para recuperar la paz social, la tranquilidad de los pueblos y la seguridad. Hacer respetar las leyes y aplicarlas ha limpiado el camino para la construcción de un estado más igualitario, de libertades, sin corrupción.
Para muestra un botón. Por decisión del gobernador se aplicó la ley para que los predios y terrenos, incluso casas y ranchos, que habían sido invadidos por supuestos grupos campesinos fueran devueltos a sus legítimos propietarios.
Es más, a través de la estricta aplicación de las leyes se castigaron diversos atropellos a la sociedad como los injustos bloqueos carreteros y hasta varios funcionarios públicos fueron despedidos tras ser descubiertos abusando de su autoridad para extorsionar y desviar dinero público. Estas personas están haciéndole frente a la justicia porque, como nunca antes, hoy no se tolera la corrupción y tampoco se fomenta la impunidad.
Otro factor que generó confianza en el gobierno fue el esfuerzo constante por reestablecer la seguridad y la paz social, conseguida a través de la estrategia de las Mesas de Seguridad. De acuerdo con los últimos reportes del Secretariado Ejecutivo de Sistema Nacional de Seguridad Pública, Chiapas se encuentra entre los dos estados más seguros del país con la menor tasa de delitos de alto impacto y delitos generales.
A todo esto, no podría desdeñarse el hecho de que el doctor Escandón tiene una idea clara de lo que Chiapas necesita. Los que hemos tenido la oportunidad de platicar con él, podemos ser testigos de que es un gobernante que tiene la radiografía completa del estado, que ubica con claridad qué requiere cada región, cuál es el problema más prioritario en cada sector social y sabe el nivel de vulnerabilidad que vive cada pueblo y grupo comunitario.
Bajo ese entendimiento dirige sus acciones y ha diseñado las políticas públicas para atender los rubros y las necesidades específicas.
Esto podemos constatarlo en las prioridades del Presupuesto de Egresos de todos estos años, en los que el sector salud, la educación y la obra pública han recibido mayores recursos en comparación con sexenios anteriores. Lo mismo podemos decir de las partidas asignadas para la atención de las personas en situación de vulnerabilidad y con alto grado de marginación.
Cabe mencionar que gracias a la excelente relación del gobernador con el presidente Andrés Manuel López Obrador, Chiapas ha conseguido los más altos presupuestos del país en todos estos años, que ha venido a fortalecer los planes en materia de obra pública, seguridad, salud, educación, fomento económico y desarrollo social.
FORTALEZA ECONÓMICA
Termino con esto: según datos recientes del Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), un centro de investigación apartidista y sin fines de lucro que estudia y propone políticas públicas para el fortalecimiento económico del país, informó que Chiapas ocupa el segundo lugar a nivel nacional con mayor crecimiento económico, que es reflejo de la fortaleza económica estatal y de las mejores condiciones de vida de los chiapanecos.
Inclusive, durante esta administración se rompieron récords en materia de generación de empleos formales y su duplicó la cifra de espacios de trabajo creados durante el sexenio anterior.
Un logro histórico del gobierno del doctor Escandón Cadenas es haber reducido la pobreza en un 10.6 por ciento, que equivale a que más de 636 mil chiapanecos viven ahora en mejores condiciones de igualdad y justicia social.
Ningún proyecto gubernamental en lo últimos 30 años ha tenido el éxito del gobierno de Rutilio Escandón.
Así que, por sus buenos logros y resultados, ¿cómo no confiar y apostarle a la continuidad de la Cuarta Transformación?
yomariocaballero@gmail.com
